WACKEN 2009: al completo


Ya están a vuestra disposición las cuatro partes que conforman el testigo escrito de lo ocurrido desde la noche del 26 de Julio hasta la mañana del 3 de Agosto de 2009. Para acceder a ellas tan solo tenéis que pinchar en el título de la parte que queráis leer. Que lo disfrutéis ;)








WACKEN 2009 (4ª parte): Tercer día

Ya en la última jornada, el cansancio se adueñaba de nuestros desfasados cuerpos, y a esas alturas el cansancio conduce inevitablemente a la pereza, por lo que esa mañana elegí desayunar como un señor frente a la opción de ir a ver a EINHERJER y/o a SUIDAKRA. Pove por su parte quería ver a estos últimos lloviera o nevase, así que fue en calidad de "corresponsal" en aquel frente mientras yo buscaba en el macuto y por los puestos de comida algo que llevarme al estómago. A la vuelta trajo consigo esta breve reseña de lo acontecido en el Party Stage:

"Tras madrugar en vano, y quedar atrapado en las primeras filas de Napalm Death la mañana anterior (esperando ver salir a escena a Suidakra), puse de nuevo el despertador para ver POR FIN a los vikingos de Düsseldorf. Una vez más, pude agarrarme a la valla, desde donde ya se empezaba a ver como los pipas instalaban adornos celticos rojos y dorados, y una especie de duendecillo/monete/bicho gracioso cerca de un bafle... Esta vez eran ellos, sin duda.


Ya con los músicos sobre el escenario, asumimos que la simpatía de los miembros de la banda es una de las bazas de su directo, debido entre otras cosas a que el mismo Arkadius contestaba personalmente desde su posición a todos los fans que le gritaban, ya fueran piropos o insultos xD En cuanto al show, decir que desde que abrieron con "Wartunes" disfrutaron de un sonido muy nítido y bien ecualizado, bordando temas como "Dead Man′s Reel", "Gates of Nevermore", y la traca final, constituída por "Shattering Swords" y "The IXth Legion", canciones con las que acostumbran a despedirse."

¡¡Gracias Pove!! Fue luego cuando fuimos a ver a RAGE cuando me dijeron que las dos bandas de viking mañanero habían estado cojonudas. Aunque en ese momento prefería centrarme en la actuación de Peavy, Victor y André, que celebraban en la sagrada tierra de Wacken su vigésimo quinto cumpleaños como banda (aunque bien es verdad que de los miembros originales queda solo uno). Se centraron mayoritariamente en sus últimos diez años de historia, dejándose en el tintero temazos de la época del "Black In Mind", aunque supieron elegir bien las canciones.




No obstante, durante la hora que tocaron se dedicaron a sacar diversos invitados, que por muy lujosos que fuesen, no son de Rage. Hubiera molado que sacaran a uno o a dos, en una o dos canciones, pero no que pareciese un concierto de versiones. Los elegidos fueron Hansi Kürsch, que estrenaba look, al menos para mí (y he de añadir que con el pelo corto parece un psicópata); Jen Majura (una cantante de pop-rock alemana), Schmier de Destruction y Eric Fish de Subway To Sally, que tocaba esa misma noche en ese mismo escenario con su banda principal. Las únicas tres canciones que tocaron sin compañía fueron la primera, "Carved In Stone", "Higher Than The Sky" y "Soundchaser", que sirvió para cerrar. Un concierto del que me esperaba más, pero que no decepcionó, aunque me hubiera gustado verlos íntegros.

Setlist:

Carved In Stone
Higher Than The Sky
(aparece Hansi Kürsch y les acompaña durante)
Set The World On Fire
All I Want y
Invisible Horizons
(Se va Hansi y aparece una tal Jen Majura, que les acompaña durante)
Lord Of The Flies y
From The Cradle To The Grave
(se va la tía esa y aparece Schmier de Destruction, que les acompaña durante)
Prayers Of Steel
Suicide y
Down
(Se va Schmier y aparece Eric Fish de Subway To Sally para ayudarles con)
Gib Dich Nie Auf
(Y POR FIN se quedan solos para terminar con)
Soundchaser


A partir de entonces el plan consistía en irse al Wackinger a comer y volver para ver el final de TESTAMENT, empezar a ver Heaven Shall Burn y mudarnos al party a ver Borknagar. Como ya escribí en su momento, el Wackinger mola demasiado, así que cambiamos la actuación de los californianos por otra jarraza de fría Franziskaner y un rato admirando las majaderías medievales del poblado vikingo.


Volvimos al recinto para ver cómo HEAVEN SHALL BURN guiaban a sus espectadores hacia sus letales circle pits; eran tan grandes que uno de ellos rodeó la torre de sonido del Black Stage. Vimos las dos primeras, "Endzeit" y "Behind A Wall Of Silence" y nos trasladamos al otro escenario.


Lo cierto es que me quedé con ganas de más accíon, pero bastante había tenido ya con Amon Amarth el día anterior como para meterme ahora en otro torbellino de hostias... En el Party por su parte se estaba bastante tranquilo. Vintersorg y sus BORKNAGAR ambientaban debidamente la hora de la siesta con su Black-suave/progresivo (os aseguro que es la manera más certera de catalogarlos).


Que por cierto, me encanta como los estilos progresivos aprovechan a sus bajistas. El de Borknagar en particular esgrimía un misil de ocho cuerdas, y doy fe de que sabía utilizarlo. Entre los temas elegidos para seducir al público wackeniano se podían oir bastantes pertenecientes a la etapa en la que I.C.S. Vortex ejerció de vocalista, osea, de los discos “The Archaic Course” y ”Quintessence”. La correcta interpretación de esas líneas vocales, que más que melodías parecen montañas rusas (van de lo más agudo a lo más gutural), me demostraron que Vintersorg poco tiene que envidiarle al ahora ex-bajista de Dimmu Borgir, aunque me faltó una de mis favoritas, que es “Colossus”.




Todo hubiera sido perfecto de no ser por el deficiente sonido, pues el bajo se merendaba a la guitarra. Fue ese volumen variable de los instrumentos el que también confundió al cantante, que según lo que he leído luego en los fotos se fue guiando por las melodías de teclado. Pese a todo, este grupo era para mí (junto a Nervecell) una de las golosinas de esta edición, y el sabor de boca que me quedó fue el de una golosina precisamente: bastante dulce.

Setlist:

Ruins Of The Future
Gods Of My World
Oceans Rise
Universal
Inherit The Earth
The Black Token
Future Reminiscence
Ad Noctum

Tras esto, nos tomamos un descansillo (a saber dónde[ENLAZAR FOTO] xD) y luego… En fin, ¿cómo te sentirías si fueran a evacuar la tierra y te dieran a elegir entre salvar a tu padre o a tu madre? Una sensación parecida es lo que sentí cuando la pésima planificación de horarios me obligaba a escoger entre IN EXTREMO y PAIN.



El modo de actuar elegido no fue ni más ni menos que el mismo que con Heaven Shall Burn y Borknagar, aunque esta vez nos pesó en el alma dejar al último unicornio (traducción literal de “Das Letzte Einhorn”, que es como se hace llamar el frontman de In Extremo) y a sus artistas con la palabra en la boca. Una verdadera pena porque había un ambiente inigualable, directamente proporcional a la densidad de gente, y es que esta banda atrajo en su mayoría a compatriotas, y de eso en Alemania hay millones. Nos emocionamos con las alegres “Sieben Köche” y “Frei Zu Sein”, y esquivando a una excitada muchedumbre que ya empezaba a corear la preciosa “Vollmond”, nos fuimos a verle la cara al señor Tägtgren, dos escenarios más a la derecha.

Accedimos fácilmente a las primeras filas, y desde allí atendimos a todo lo que decía el lunático que había tras el micrófono. Llegamos bailando “Suicide Machine” y después los temazos se fueron sucediendo los unos a los otros. Las pegadizas “Nailed To The Ground” y ” Zombie Slam” no tardarían mucho en hacer vibrar al eufórico gentío; aunque aquello no se transformó del todo en una rave hasta que empezó "On And On”, la canción garrula por antonomasia. Me decepcionó un poco que utilizasen samplers en directo en vez de contratar a algún teclista y/o dj eventual, o algo por el estilo para que se encargara de las partes más “electrónicas” (los sintetizadores, los ruidos raros, las partes bakalas…), pero desde luego no fue razón para aguar la fiesta.


Teniendo en cuenta que Peter sólo se reúne con el resto del grupo para hacer giras (recuerdo que este hombre se encarga de TODOS los instrumentos en los discos de estudio de Pain), es admirable como estaban de compenetrados sus ocasionales compañeros, bautizados por él mismo como “Brazo Derecho” el batería, “Pierna Izquierda” el guitarra y “Pelotas” el baterísta. Él se autoproclama como el “Cerebro”, con mucha razón por cierto. El muy bribón además se dedicaba a cambiar partes de algunas canciones, cantándolas con los característicos growls que le han servido a lo largo de la historia para dejar su sello en formaciones tan míticas como son (entre muchíííísimos otros) su banda principal Hypocrisy; o en los celebérrimos Bloodbath durante los años que pasó entre sus filas.


Ya en torno al final, anunció que la siguiente canción iba dedicada a todas las mujeres del público, a lo que siguió el primer riff de “Bitch”, una canción “romántica” en cuya primera estrofa dice algo como “sé mi cachorrita y lame mi erección, saborea mi zumo […]” mientras que el estribillo exclama “quiero tu sexo y no tu amor, ¡ZORRA!”… Luego aclaró que se trataba de una broma (menos mal xD). Lamentablemente, el concierto llegaba a su fin de la mano de “Shut Your Mouth”. Como no, faltó tiempo para tocar “Bye/Die”, “Have A Drink On Me” o la versión de “Eleanor Rigby” de los Beatles, pero una hora no da para más… Pese a esto, fue uno de los mejores, si no el mejor concierto, de este Wacken 2009, que si bien se les quedó pequeño el Party Stage, supieron darle sentido al nombre del escenario.

Setlist:

I'm Going In
Monkey Business
Suicide Machine
Dancing With The Dead
Nailed To The Ground
Zombie Slam
End Of The Line
Don't Care
On And On
Same Old Song
Bitch
Shut Your Mouth

Ahora me arrepiento de no haber sido más curioso antes de ir hasta Alemania y perderme a VOLBEAT, unos daneses que allí en el norte brillan con luz propia, y que tocaban en el True un cuarto de hora después de que Pain acabasen su trabajo. Se trata de una banda que mezcla metal, rockabilly, punk… Un estilo un poco raro, pero que mola un huevo. Yo los empecé a escuchar después del festival y no hay grupo en esta edición que me doliera más no ver. Eso sí, fue por una buena razón, y es que tras el fiasco de las firmas de Gamma Ray nos fuimos a hacer cola como unos campeones al Meet & Greet de Pain, esta vez con una hora de antelación, y con erótico resultado:


La putada fue que, tras esa hora que estuvimos esperando, por fin empezó a avanzar la cola, que también tardó, y entramos de los últimos… Esto quiere decir que también nos perdimos la mayor parte de MACHINE HEAD, que según las malas lenguas, fue el mejor concierto de todo el festival, en el que se formó el circle pit más grande de esos tres días… Tras sacar la instantánea de rigor con tan magno artista fuimos corriendo a ver si pillábamos un buen sitio para ver a los de Rob Flynn, pero estaba la cosa imposible, así que nos fuimos al party aunque fuera a ver un poco de ENSLAVED...


... Aunque no tardamos mucho en darnos por vencidos y andar exhaustos hacia el camping para empezar a hacer el petate. Luego fuimos en masa a ver el desinflado show de KORPIKLAANI (que además no se oía una puta mierda porque SAXON no habían terminado todavía de tocar en el True, solapándose así el sonido de ambos); y más tarde a mantenernos en pie, medio durmiendo, intentando atender al también soporífero recital de SUBWAY TO SALLY, que son popularmente considerados como los clásicos que clausuran el festival con broche de oro...


Pero bueno. Cogimos nuestras cosas, las subimos al autobús y para casa. Nos valimos de los patés que quedaban para abastecernos durante la vuelta. De esta etapa no hay demasiados puntos reseñables, con permiso de los walls of death en las estaciones de servicio, el proyecto Diógenes (en la foto) y de ese precioso escupitajo cuyo origen estuvimos discutiendo durante todo lo que duró esa parada en concreto.


En conclusión: como todo en la vida, la ilusión y la intriga de la primera vez son sensaciones irrepetibles, por lo que no disfruté el festival de la misma manera en que lo hice la vez anterior. Al principio todo me parecía un gigantesco déjà vu: el mismo autobús, el mismo recorrido, la misma Ámsterdam… Era todo como muy rutinario, como que sabía todos los pasos que íbamos a dar y por dónde. Además cuando llegamos allí estaba todo en el mismo sitio, en las mismas colinas incluso que el año anterior. Pero fue el momento en el que fuimos a tomar la primera jarraca de franziskaner, al lado del Wet Stage… El primer día, cuando todavía no había conciertos en el recinto grande.


Nos sentamos en un trozo de césped al lado de una valla que cortaba el paso, pero tras ella se podían apreciar con total claridad las faraónicas dimensiones de los escenarios principales, a medio kilómetro de distancia, un medio kilómetro plagado de verdes prados que en unas horas sucumbirían a setenta mil pares de botas… Cuando esa imagen entró por mi retina me invadió la misma sensación de insignificancia que experimenté el año anterior cuando entré por la puerta del recinto y vi… Eso.


Una sensación que, sin duda, vale la pena repetir una y otra vez, pues es una de esas veces en que la vida te recuerda que hay unas pocas cosas, y en este caso, unos pocos sitios, que están hechos para tí. Después de haber asistido dos veces al festival, cuesta mucho creer que haya gente en el mundo que no sepa que existe algo tan enorme, y lo que es peor: que haya quien condene el heavy metal sin saber siquiera que este lugar, su templo, hace realmente feliz a las personas que lo visitan. Sólo quiero decir que es precioso el hecho de que exista un pueblo en el mundo, en el cual, durante una semana la música suponga un vínculo y una excusa para que todos los allí presentes se lleven bien y disfruten de su estancia en lo que para mí se ha convertido en una efímera versión anual del paraíso, a un módico precio claro xD


De nuevo agradezco a Valkyria que nos brinde la oportunidad de hacer nuestros sueños realidad (este año volvemos, ¡¡y en mayor número!!), y a vosotros mis queridos lectores, desde los cafres que veo todos los fines de semana hasta aquellos que se acercaron a mí en el autobus preguntando si era yo "el del blog"... La de gente que me dijo "pues yo no he traido botas, ¿pasa algo?" en tono vacilón... No sabían a dónde iban, y mira que se lo advertí xD Bueno, espero que os haya gustado este tochaco. Más vale tarde que nunca ¿no?

Y sobre todo muchas gracias a las fotos de W:O:A Gallery, Festivals2go, Guillermo, Vicky, Chema, sin ellas no hubiera sido lo mismo. Aunque las mías siempre les pegarán mil patadas a las vuestras xD

Saludos a todos! y ya sabéis dónde encontrarme ;)

WACKEN 2009 (3ª parte): Segundo día



¿Qué mejor que desayunar al compás de NAPALM DEATH? yo creo que hubiera estado mejor si se hubieran cumplido los horarios preestablecidos y hubiéramos desayunado al son de Suidakra, pues eso es lo que indicaba el programa. Para la próxima vez espero que la organización piense en aquellos que se quedaron durmiendo tranquilamente pensando en que verían a los pioneros del Grindcore a las 11:00 del Sábado... No obstante sólo tocaron tres cuartos de hora, y encima yo me fui a ver a lo que quedaba de Windir, y es que VREID tocaban simultáneamente en el Black Stage. A este me acerqué por curiosidad, y salí gratamente sorprendido.


De ENDSTILLE vi el final, aunque sinceramente no me reconcome la conciencia, pues no es el ese tipo de Black Metal un estilo que me guste (cuánto menos que me apasione), tan solo me acerqué por curiosidad, y para encontrar con suerte algún montículo desde el que se pudiera ver bien el concierto de GAMMA RAY, heroes de mi infancia metalosa. Tras una corta espera el tito Kai y los suyos salieron a escena arrancando de sus instrumentos las melodías que conformaban "Heavy Metal Universe", seguida de “New World Order”; y antes de acabar la canción, sonó ese famoso riff de "Gorgar" (de los tiempos en los que Helloween hacían buena música) que siempre utilizan para dar paso a "Ride The Sky".


Este fue el primero de los Medleys que hicieron durante su concierto, que si bien sirvieron para acortar las canciones, también nos ofrecieron la oportunidad de paladear una mayor cantidad de clásicos como son "Future World" y "I Want Out". El setlist hubiera sido bastante rutinario de no ser porque incluyeron una canción nueva llamada "To The Metal", perteneciente al disco homónimo que sacarán en Febrero… Lo cierto es que me pareció una canción bastante fea (espero que sea lo peor del póximo disco), aunque eso no me impidió ver y disfrutar de Gamma Ray jugando en casa. Quién le diría a mi niño interior que la cuarta vez que los viese sería a setenta y cinco kilómetros del hogar de Kai Hansen… Doy fe de que ese renacuajo podrá morir tranquilo.


Setlist:

Heavy Metal Universe
New World Order
Rebelion in Dreamland / Man On A Mission
Into The Storm
Heaven Can Wait
To The Metal
Gorgar / Future World / I want Out
Somewhere Out In Space
Send Me A Sign

Al rato Vicky me lió para que fuésemos a ver a TRISTANIA, que ni me van ni me vienen; suerte que yendo para el Party pasásemos por un puesto de comida tailandesa y que, por consiguiente, unos noodles me hicieran más llevadera la actuación de los góticos noruegos. Mirando el programa leí que Gamma Ray iban a estar en la carpa de firmas sobre esa misma hora, así que no hubo más remedio que sacrificar la actuación de NEVERMORE con tal de que, por fin, después de haberlo visto cuatro veces en directo, el señor Hansen me firmara aunque fuesen los calzoncillos. Para variar, la cola era insultantemente larga, y me avergüenza afirmar que nos quedamos a unos pocos metros de poder entrar al pasillo en donde los miembros de la banda repartían posters firmados y se hacían fotos con los fans. Quizás a la quinta vaya la vencida…

Una cerveza en el Wackinger me ayudó a consolarme y me llenó de ganas de ir a ver a AIRBOURNE, los australianos que les están intentando arrebatar el trono a los ya veteranos ACDC. Era el segundo año consecutivo que tocaban en Wacken y esta vez la gente había acudido a verlos en mayor número. Tanto fue así que creímos mejor intentar los propio con DRAGONFORCE, que tocaban a la vez en el Party, pero el apelotonamiento era inversamente proporcional a las ganas que teníamos de verlos, así que fuimos al camping a hacer tiempo hasta que empezase la siguiente banda interesante.

De camino hacia allí, nada más entrar en el camping B, nos encontramos a dos tías comiéndose el morro lenta y apasionadamente. No sé si estarían drogadas o algo, pero les importaba una mierda que pasase gente alrededor; de hecho les importaba tan poco que empezaron a meterse mano a lo bestia. Como no, fui corriendo comunicarle a Antonio (que estaba en su tienda) la noticia de que teníamos un live show gratuito a menos de 50 metros.


No tardaríamos ni un minuto en volver al lugar de los hechos, pero al parecer fue suficiente para que se formara un corro de 20 tíos babeantes alrededor de las chicas, que en ese momento ya se habían desecho de sus sujetadores. Las muchachas no tenían mucho, la verdad, pero ver a veinte alemanes cantar al unísono "Shoooow meeeee yoooooour tits tits tits tits..." fue verdaderamente impagable xD

En fin, volviendo al tema: llegado el momento no éramos muchos los congregados en el WET para ver a los dubaitíes NERVECELL, ya que muchos estarían pillando sitio para ver a Motörhead y otros tantos en el medieval disfrutando del espectáculo de SWASHBUCKLE, quienes aseguraron que los piratas californianos la liaron pardísima (sacaron a gente disfrazada de loro, de tiburón, etc, PORNO hablar de los innumerables circle pits, walls of death…). No obstante los saudíes que yo ví se marcaron un concierto de órdago.


En cuarenta y cinco minutos les dió tiempo a realizar una breve síntesis de sus dos únicos discos de estudio, aunque en especial del último, "Preaching Venom", del que tocaron temazos de la talla de "Flesh and Memories" o "Vastlands of Abomination" sin olvidar sus propios clásicos, como la machacona "Demolition", todos ejecutados a la perfección, y con un grupo totalmente sincronizado. Antes de partir agradecieron encarecidamente nuestra presencia y afirmaron estar flipando por el hecho de haber ascendido tan rápido en los estratos del metal, al menos lo suficiente para estar tocando en el festival más importante del mundo. Toda una lección de humildad, que acompañada de un brutal sonido, conformaron uno de los conciertos más redondos (y más exclusivos) del festival. Aunque salimos de allí sordísimos.

El concierto de MOTÖRHEAD por su parte juntó a una cantidad de fans comparable a la que reunieron los Children el año anterior en ese mismo escenario, pues era imposible acercarse a menos de 300 metros del gran Lemmy y las jamelgas ligeras de ropa que bailaban a su alrededor esquivando las llamaradas que emanaban del proscenio. La densidad de público en ese momento podía superar fácilmente las cinco personas por metro cuadrado, así que fuimos a echar combustible para ver a ciertos mentores del death melódico de Gotemburgo sin preocupaciones.

Desgraciadamente, la pésima planificación del horario por parte de los organizadores me obligó a sacrificar el concierto de EPICA con tal de ver a IN FLAMES desde una posición "relativamente" aventajada. Por suerte Vicky no pensó como yo y se fue a ver cómo los holandeses estrenaban guitarrista. Por lo visto fue un conciertazo, no como el cuestionable show de In Fames... ¡Uy! ¡qué errata más inorportuna! en realidad no estuvieron TAN mal como para decir que estuvieron "infames", pero sí que fue uno de los conciertos que más polémica levantó respecto a la calidad del sonido del festival, ya que parecía difícil de creer que a unos les pareciera el mejor concierto de su vida mientras que a otros les pareciese un robo a mano armada... Cuando pusimos nuestras opiniones en común, los que estábamos más lejos del escenario coincidimos en una cosa: en que el sonido se lo llevaba el viento, literalmente. Era soplar una ráfaga y el volumen variaba notablemente.


Pero a lo que íbamos: como iba diciendo yo estaba a tomar por culo, pero lo suficientemente cerca como para apreciar el espectacular escenario que montaron. Varias pantallas de Leds colgaban del letrero dónde ponía Black Stage, y otras tantas situadas a ambos lados de la batería. Estos recursos aderezaron con luz y color un show en el que, a mi ver, fallaron las ganas de los artistas y el setlist elegido, basado casi enteramente en sus dos últimos trabajos. Sí, yo soy uno de esos de los que sólo le gustan los discos viejos de In Flames, ¿pasa algo?

Por suerte o por desgracia llegaba el momento que había estado esperando mientras repasaban todo su nuevo material. De repente Anders nos ordenó que saltásemos, y eso fue lo que hicimos al ritmo del himno que empezó a sonar a continuación: "Only For The Weak" hizo botar a todos los allí presentes con sus alegres acordes iniciales. Servidor, como uno más, no podía evitar unirse a esa ingente multitud extasiada en su repetido intento por tocar las nubes. Hubo un momento en el que, por curiosidad, paré de saltar para comprobar el seísmo que esos 50.000 jubilosos metalheads estaban causando (no me extrañaría en absoluto que al día siguiente hubiera un tsunami en las antípodas de Wacken). No obstante el señor Fridén la cantó con un registro melódico, y no una mezcla entre eso mismo y la voz gutural. Y me da igual que en directo lo suela hacer así, porque a mí me destrozó una de mis canciones favoritas.

El resto del concierto hubiera transcurrido sin sobresaltos (para mí) de no ser por "My Sweet Shadow" y el despliegue pirotécnico que les sirvió a los suecos de despedida. En conclusión, un recital (repito, a mi ver) bastante mediocre, pero que consiguió arrancarme una lagrimilla cuando sentí en mi cara el calor de las lejanas y descomunales columnas de fuego que en ese momento se erigieron por encima de las torres de sonido, seguidas de cerca por la orquesta de colores que constituían los fuegos artificiales que escupía el escenario principal…


... Fue un momento Wacken en toda regla, un momento en el que una extraña empatía te conecta con todos los que están a tu alrededor y, sin razón aparente, te fusionas con el sentimiento que sabes que todos están experimentando también… Es algo difícil de describir, simplemente entras en la dimensión que es Wacken, dónde el buen rollo y la buena música imperan sobre todo lo demás. Un recuerdo que se archivará en mi memoria junto a "Farewell" de Avantasia (en 2008), cuando una suave melodía de flauta levantó y balanceó los brazos de una multitud que consiguió recrear un tranquilo océano de manos.

Quince minutos separaban el final de In Fames (juas juas) y la salida a escena de la queridísima DORO Pesch, por lo que la gente empezó a emigrar al escenario de al lado dejándonos sitio para adentrarnos en las primeras filas y aguardar, desde una posición (esta vez sí) aventajada, a que Johan y sus demás vikingos nos deleitaran con su esperado espectáculo.

Pero para mi sorpresa, Doro hizo temblar el cielo y la tierra nada más salir de su garganta la primera nota de "Für Immer", una canción que pese a no ser demasiado cañera caló hondo en los presentes, incluido en un servidor, quién no tenía más remedio que acechar desde una perspectiva lo suficientemente oblicua como para que las pantallas gigantes supusieran la alternativa perfecta a la tortícolis. Y pese a que la Doro que veíamos en las pantallas no era más que una imagen reflejada, el sonido le hacía temblar a uno el pecho (el volumen era absolutamente brutal); una sensación impactante que contrastaba muchísimo con la poca capacidad que mostraron In Flames para exprimir los altavoces.


No es que sea un gran admirador de esta mujer, pero fue un rato inolvidable; por esa misma razón sólo distinguí muy pocas canciones, como “Für Immer”, “I Rule the Ruins”, la versión de “Breaking The Law” y el himno obligado para cerrar: “All We Are”, que fue celebrada al unísono por toda la comunidad metalosa allí congregada. No obstante, he encontrado por ahí este setlist que seguro que no deja indiferente a ningún fan:

Für Immer
I Rule the Ruins
Burning The Witches
True As Steel
The Night Of The Warlock
Fight
Above The Ashes
Burn It Up
Celebrate (with Sabina Classen)
Breaking The Law (Judas Priest cover)
All We Are

Y mientras la tetona teutona (no podía evitarlo xD) nos agradecía la presencia y se despedía en todos los idiomas que conocía (verídico), los pipas ultimaban los detalles del escenario de los cabezas de cartel del Black Stage: la proa de un drakkar servía de tarima para apoyar la batería, y por encima de esta colgaba lo que parecía ser la vela del navío; mientras que a los lados se dispusieron unas vallas de madera como si de una fortaleza se tratase. Todo esto en su conjunto conformó el contexto ideal para que numerosos actores imitasen a caballeros medievales chocando sus espadas mientras los suecos AMON AMARTH movían sus cabelleras en sentido antihorario al ritmo de sus composiciones.


Y cómo había sido habitual en su último periplo europeo, abrieron con "Twilight of the Thunder God" y fue entonces cuando fuimos verdaderamente conscientes del riesgo al que estábamos expuestos: estábamos en la tercera fila, de uno de los dos escenarios principales, en Wacken, con 40000 personas a nuestras espaldas... Y otras tantas (bueno, quizás menos) que pasaron por encima de nuestras cabezas. Cada cinco minutos debían de pasar al menos tres crowd-surfers a los que sostener en volandas si uno no quería verse aplastado por un saco de carne (y barro, mucho barro) de 80 kilos de peso (mínimo). La mayoría de esta gente con botas militares, y unos pocos con kilt y "en plan comando"... Esto te obligaba a estar constantemente pendiente de la retaguardia, para que encima no te pillara de sorpresa.


Volviendo al concierto... ¡¡¿¿Pero qué concierto ni qué hostias??!! ¡¡yo estaba luchando por mi puta vida!! no tenía más remedio que oir las canciones mientras defendía mi cabeza y la de Vicky. Del setlist sólo puedo decir que fue una receta de cuyo sabor estoy ya un poco cansado. Hubo cinco temas del último disco, tres del anterior, "Victorious March", "Pursuit Of Vikings" y "Death In Fire". Nada de "A Fury Divine", "The Last with Pagan Blood" o alguna que otra golosina para los paladares más exquisitos. No, tuvieron que tocar lo mismo de siempre...

En realidad fue un buen concierto ¿vale? lo único que la próxima vez me dedicaré a admirarlos desde cincuenta metros de distancia como mínimo... Entre otras cosas porque en "Victorious March" la situación era ya insostenible. Tenía las pelotas tan hinchadas que mantenía a flote a los que pasaban por encima de mí a base de puñetazos. Por si el agobio fuera poco, solo faltó que me pegasen una patada en la cara y perdiera las gafas... Yo no tuve otra que resignarme, pues a ver quién es el valiente que se agacha a cogerlas en esa situación. El caso es que a Vicky pareció joderle el triple que a mí y casi mata a patadas a un gigantesco alemán al que nadie sostuvo, y que cayó al suelo poco antes de que empezase a sonar la última ("Death In Fire"). Fue durante el principio de esa canción cuando huimos literalmente de la masacre final, en la que hubiera rodado la cabeza de mi queridísima (y sorprendentemente violenta) novia.

Setlist:

Twilight of the Thunder God
Free Will Sacrifice
Asator
Guardians of Asgaard
Varyags of Miklagaard
Runes To My Memory
Live for the Kill
Victorious March
The Pursuit of Vikings
Cry of the Black Birds
Death in Fire




WACKEN 2009 (2ª parte): Primer día de conciertos


Amanecimos parcialmente repuestos del palizón de autobús, y las endorfinas liberadas con simplemente el subidón de estar en Wacken hacían las veces de estimulante para aguantar una jornada que, esta vez, nos traería a algunas de las bandas más importantes de esta edición. No obstante, desde el saco de dormir ya percibíamos cómo el viento sacudía la funda de la tienda. Cuando asomamos la cabeza el paisaje era desolador: Antonio y los demás miembros de nuestra compañía intentaban erigir de nuevo nuestro toldo, pues había sido una de las muchas víctimas que Eolo se cobró esa mañana; mientras que a lo lejos se podía observar cómo otros toldos similares salían literalmente volando por encima de la gente. Después de hacer varias chapuzas con los restos de la carpa a Antonio se le ocurrió una manera de aprovechar el plástico blanco y los hierros. Estos últimos los clavamos en el suelo delimitando el área que ocupaban nuestras tiendas y con la lona… Bueno… Hicieron esto:


Ponía claramente: “TRUE SPANISH SEX CAMP, TITS OR GTFO, ugly chicks will be shot (survivors will be shot again)” y un pequeño mensaje en español que decía “la que no folle que no entretenga”. Al igual que en un principio me negué a exponerlo públicamente, bien que me partí el culo cuando lo pusieron en la valla y cuando la gente se paraba a leer lo que ponía. Y aunque me reafirmé un poco cuando nos robaron la legendaria bandera española de wacken hecha por mí (supongo que algún gilipollas podría haberse ofendido lo suficiente como para robarnos nuestro estandarte), la coña valió mucho más que una bandera española de los chinos, un bote de spray negro y una cartulina con la que hacer la plantilla. Este año haremos más de una, por si acaso.

Ya por la tarde, abrieron las puertas y guié a mis acompañantes hacia los puestos de camisetas de dentro del recinto de los escenarios grandes. Sin duda, el más llamativo fue el de la Nuclear por unas ofertas dignas de un mercadillo de barrio. Nos abalanzamos sobre cajón de "rebajas" y cada uno se llevó un mínimo de dos camisetas, pues las había de Hypocrisy, de Wintersun, Immortal... Todas a cinco míseros euros de distancia. Visto que los de SPV no habían montado el chiringuito en esta ocasión, me llevé a los arrebatados consumistas que había creado hacia el puesto de Metal Hammer a coger varios ejemplares gratis (además este año incluían un disco de Eluveitie).

Para cuando quisimos darnos cuenta SCHANDMAUL llevaban ya un rato tocando. Para mí fue la primera banda de Folk en decepcionarme a lo largo del festival (lo digo porque no fue la única). Los ví muy faltos de fuerzas... Como que el Black Stage y el público que les apoyaba les quedaban demasiado grandes para el estilo pausado que venían predicando. Eso sí, pudimos apreciar por primera vez en esos tres días como grupo puede reunir a tantísima gente delante de un escenario:


Empezaron a llegar rumores de que ANTHRAX no iban a tocar al final (fue justo la época en la que no sabían con qué vocalista quedarse, si con John Bush o con Dan Nelson) y de que habían metido a Edguy para sustituirles. Se corrió la voz, se decía que había salido anunciado en no sé qué pantallas... ¿Era eso entonces el secret show del que tanto se había hablado? al parecer no. Al comprarnos las camisetas ya me extrañó que J.B.O. figurase en el cartel, pero no dí demasiado crédito hasta que me ví delante del escenario del Party observando con indignación como se inflaban unas letras rosas, conformando el nombre de la banda alemana. Pasa lo mismo que con Frei Wild: se trata de un grupo alemán hecho para alemanes.

En ese momento nos sentimos un poco excluidos, ¡¡una excusa perfecta para hacer una visita al Wackinger y pedir una cachimba!! total, había tiempo para llegar al final de RUNNING WILD, que para ser su último show en la historia no se curraron una mierda el escenario. Unos amplis verdes, otros rojos, un bombo suspendido en el aire a cada lado de la batería y un pañuelo en la cabeza de cada uno de los supuestos corsarios... Vamos, pirata que te cagas. Si me dijeras que luego tocaron bien vale, pero entre mis colegas había fans acérrimos a quienes dejaron bastante fríos…


…Aunque fríos nos estábamos quedando todos, pues en ese momento las temperaturas cayeron más rápidamente que mi libido cada vez que pongo telecinco. Me acuerdo de ir corriendo con Vicky hacia la tienda para coger el abrigo porque queríamos ver a LACUNA COIL, aunque fuese desde la mitad del concierto en adelante, pero con la rasca que hacía terminamos “cogiendo el abrigo” mientras se oía de fondo a Cristina Scabbia cantar “Closer”. Una vez caldeados, nos apresuramos al escenario para verlos terminar con la versión de "Enjoy The Silence" de Depeche Mode, para irnos inmediatamente a ver al ahora convaleciente Dio con Black Sabbath (ahora HEAVEN AND HELL por problemas de derechos con Ozzy), que resultó ser un recital magistral, totalmente a la altura de las circunstancias.

Un inmenso True Metal Stage había sido debidamente habilitado para la ocasión, emulando lo que sería el interior de una iglesia. Una pantalla situada detrás del grupo ilustraba las canciones, y una ostentosa batería envolvía a Vinny Apice como si de un aura de tambores se tratase, un hecho injustificado a juzgar por el solo que se marcó durante “Time Machine”, en el que este hombretón de cincuenta y ocho claveles intentó tocar todas las cajas que había, quizás con la intención de dar fe de que estaban allí, que las podía tocar todas. Lo que quiero decir es que veo bien que le pongan todas esas polladas a Mike Portnoy o a Terrana, pero no a un tipo que tampoco es que tenga que dar tanto de sí con su instrumento...


En fin, a lo que iba: tocaron "Mob Rules, "Neon Nights", "Children Of The Sea" (entre otras) y una versión extensísima de "Heaven And Hell", en donde alargaron el interludio nada más y nada menos que catorce minutos!! En general, todos unos maestros, claramente avalados por un largo historial de triunfos y experiencias, derrochando seriedad y virtuosismo en cada nota de música que producían. Hay quien dice que son muy fríos sobre el escenario; otros sin embargo dicen que son muy profesionales... A mi personalmente me encantaron (aunque no tanto como al tío que teníamos al lado, que no paraba de bailar con los pies pegados al suelo xD). Fue un concierto de los que vale la pena presumir, y si tenéis la oportunidad de ver a Heaven & Hell en directo os aconsejo que no la desperdiciéis si no queréis arrepentiros.


Setlist:

The Mob Rules
Children Of The Sea
I
Bible Black
Time Machine
Fear
Falling Off The Edge Of The World
Follow The Tears
Die Young
Heaven And Hell
Country Girl
Neon Knights


Y como es costumbre (al menos estos dos últimos años), el recinto sella sus puertas al término de la actuación del cabeza de cartel del Jueves, cerrando así una jornada corta (en comparación a los dos días siguientes) pero intensa.